La telemedicina, una inversión necesaria y con futuro

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Según las estimaciones cerca del 10% de la población española tiene algún grado de dependencia y el 50% de los mayores de 60 años, acude al médico de Atención Primaria una o dos veces al mes. 

Se calcula que en 20 años, los pacientes crónicos ascenderán al 30% de la población y será fundamental el seguimiento continuado de pacientes crónicos, ancianos y dependientes que se encuentren en fase estable por medio de dispositivos de telemedicina instalados en sus hogares, centros de salud o residencias de ancianos.

La consultora tecnológica CMC estima que el volumen de negocio de la telemedicina en España podría alcanzar la cifra de los 4.000 millones de euros en sólo dos años. Una cifra que demuestra que las tecnologías para la salud son una enorme oportunidad. 

Aunque la realidad demuestra que el sector sanitario aún no ha adoptado la telemedicina, es un sector que camina despacio, pero con paso fuerte, en la necesaria adopción de las nuevas tecnologías. 

La Telemedicina se presenta como un instrumento clave para hacer una sanidad más sostenible y mejorar la salud de las personas: mayor eficiencia en el nivel asistencial, uso racional de los recursos sanitarios y ahorro de costes. Además, los pacientes demandan poder entablar con el personal sanitario una relación digital.
Hace poco reflejábamos en este mismo blog como un estudio de Telefónica y el IESE revela que el 70% de los enfermos crónicos españoles estaría dispuesto a utilizar la telemedicina si estuviera a su alcance, porcentaje que se eleva al 80% en el caso de los profesionales médicos

Y es que en la actual coyuntura económica la potenciación de los servicios de teleasistencia y telemedicina permitiría reducir en gran medida la factura del gasto sanitario español. Existen en el mercado varias soluciones en telemedicina como TeleMedCare, un terminal del Grupo NEAT con el que se podría reducir hasta en un 69% el coste sanitario con determinados pacientes. Esta empresa ha indicado que según los estudios realizados con su sistema de telemedicina, TeleMedCare, se llegó a reducir en 143 días la estancia hospitalaria de los pacientes, pasando de 203 a 60 días.

Un recorte tan necesario que hasta Standard & Poor’s ha advertido que, a partir de 2015, podría rebajar la calificación de algunos países si sus gobiernos no aprueban reformas para frenar el aumento del gasto sanitario y los costes relacionados con el envejecimiento de la población.

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